Las mallas de madera son muy populares porque son duraderas, estéticas y las puedes personalizar con diferentes tipos de madera y estilos.
Vallas de vinilo
Son la mejor opción si buscas una cerca fácil de mantener y duradera, puesto que son resistentes a la intemperie y no se decoloran con el tiempo.
Vallas de metal
Este tipo de vallado suele ser de hierro forjado, aluminio o acero, lo cual las hace muy robustas e inquebrantables.
Vallas de piedra
Son la alternativa perfecta si se quiere un vallado más decorativo puesto que aportan un toque rústico al jardín.
Vallas vivas
Las vallas vivas son aquellas que están compuestas por plantas y arbustos que crecen juntos para formar una barrera natural.
Además de vallas para el jardín, disponemos de mangueras para el jardín, barbacoas, mallas para el jardín, mesas para terraza y macetas colgantes.
Preguntas frecuentes sobre vallas para jardín
¿Cómo puedo mantener mi valla de jardín en buen estado?
La mayoría de los tipos de vallas requieren un mantenimiento periódico para mantenerse en buen estado. Para vallas de madera, debes aplicar sellador cada dos años y hacer reparaciones cuando sea necesario. Para vallas de metal y vinilo, debes lavarlas regularmente para evitar la acumulación de suciedad y polvo.
¿Puedo instalar una valla en cualquier época del año?
Idealmente, debes instalar una valla en la temporada de clima cálido y seco. La lluvia o la nieve pueden dificultar el trabajo de instalación y el secado adecuado del cemento.
¿Cómo puedo elegir el material adecuado para mi valla de jardín?
Debes considerar factores como el clima de tu zona, el estilo arquitectónico de tu casa y el presupuesto disponible. La madera es popular y versátil, pero requiere un mantenimiento constante, mientras que el vinilo y el metal son opciones más duraderas y requieren menos mantenimiento.